El aumento de la accesibilidad de Internet a las masas ha revolucionado la forma en que la gente trabaja, juega y se comunica. La comunicación por correo electrónico se ha convertido en el medio más popular de intercambio de información en el ámbito empresarial y personal. Los ordenadores personales, los portátiles, los dispositivos de mano y los teléfonos móviles permiten comunicarse por correo electrónico de Tecnología Sanitaria.
El correo electrónico ha crecido rápidamente hasta rivalizar con el teléfono como pieza central de la comunicación efectiva. Aunque el correo electrónico tiende a ser menos personal que una conversación de voz, se ha convertido en el medio preferido para intercambiar datos como presupuestos, facturas, literatura, referencias, información de contacto, imágenes, URLs, archivos y muchos otros recursos en línea. Este fenómeno ha dado lugar al uso indebido y malintencionado del correo electrónico.
Muchos de nosotros pasamos innumerables horas limpiando los mensajes de spam. Los que tienen filtros de correo electrónico estrictos se despiertan con sudores fríos preguntándose si ese mensaje importante se ha enviado a la carpeta de Spam. A pesar de que algunos gobiernos han tomado medidas para frenar el spam, la mayoría de la gente pasa unos 20 minutos al día borrando mensajes que ofrecen mejores tipos de interés hipotecario, vacaciones gratis o Viagra barata. No es de extrañar que muchas empresas recurran a servicios de seguimiento de correos electrónicos para asegurarse de que su valiosa información llega a la persona adecuada y es leída.
Seguro que no le sorprende que no todos los correos electrónicos que envía sean recibidos o leídos por el destinatario previsto. Hay muchas razones para que se pierdan estas piezas de comunicación, como el filtrado de spam, la sobrecarga de la bandeja de entrada, las reglas de reenvío o la simple evasión. La solución es el seguimiento del correo electrónico.
¿Qué es el seguimiento del correo electrónico?